CONOCENOS | PATRIMONIO

Dejando atrás los avatares de la vida, nuestro territorio siguió prosperando gracias al río Cinca. Sus tierras fértiles proporcionarán riqueza a los habitantes de la zona y no sólo a los ribereños, sino que, gracias a personajes tan destacados como el conocido y muy apreciado Joaquín Costa fue posible la construcción del Pantano que lleva su nombre que alimenta al Canal de Aragón y Cataluña.  A su paso por la Almunia de San Juan podemos visitar la evidencia de una avanzada ingeniería como es el Sifón del Sosa que proporciona el riego a nuestros campos y ha generado riqueza y prosperidad y haciendo honor al lema que nos legó “Escuela y Despensa”.

Todo ello propiciará la instalación de industrias como es el caso de la Antigua Azucarera de Monzón, adonde, todavía recuerdan los lugareños, como acudían de muchos campesinos de la zona con sus carros cargados de remolacha y allí nos queda el testimonio de su chimenea como monumento emblemático para Monzón.

Bajamos desde Monzón hacia Albalate de Cinca, parando a visitar las Bodegas de vino excavadas en la roca, algún centenar de años atrás, por los vecinos de Pueyo de Santa Cruz.

En la actualidad, y tras el paso de sucesivas guerras que han dejado estructuras como las trincheras de la Guerra Civil en la Ermita de San Salvador de Selgua, esta tierra sigue siendo fructífera, dedicada a la ganadería y a la agricultura y con un núcleo industrial en Monzón que ha proporcionado un importante desarrollo económico, convirtiéndose en uno de los principales focos económicos de la Comunidad Autónoma y una de las áreas más dinámicas desde el punto demográfico.