Nacido en Piedrahita (Ávila) en 1507- muere en Lisboa en 1582.

Llamado el Gran Duque de Alba, fue un noble, militar y diplomático español, III Duque de Alba y de Huéscar, marqués de Coria, conde de Salvatierra y de Piedrahita y señor de Valdecorneja, entre otros títulos, Grande de España y caballero del Toisón de Oro.

Fue hombre de confianza de Carlos I y Felipe II de España, Mayordomo mayor de ambos (1er. ministro) y miembro de sus Consejos de Estado y Guerra. Se encargó del gobierno del ducado de Milán (1555-56), del reino de Nápoles (1556-8), de los Países Bajos (1567-73) y del reino de Portugal (1580-82).

Considerado por los historiadores como el mejor general de su época y uno de los mejores de la historia.

La casa de Alba heredó el señorío alcoleano en 1558.

La actual casa del Ayuntamiento fue el lugar donde el duque poseía las cárceles, el almudín, las escuelas, el horno, la lonja, etc.

Jurista y científico. Nacido en 1774. Doctor por la Universidad de Zaragoza y obtuvo la medalla de oro de la Real Escuela de Matemáticos de Zaragoza.

Dominó diferentes lenguas como el griego, latín, francés e italiano. Parte integrante de los intelectuales de la Ilustración.

Fue el primer español que publicó un tratado sobre el modo de utilizar el telégrafo. Entre sus escritos son especialmente destacables: Arte de hablar desde lejos (Miedes, Zaragoza, 1801).

Nacido en 1786. Militar que brilló por su heroísmo en los Sitios de Zaragoza, durante la guerra de la Independencia. A su término marchó a América, donde permaneció algunos años. De ideas políticas liberales combatió a las órdenes de Espoz y Mina contra los carlistas durante la primera guerra carlista. Tuvo que huir a Inglaterra en 1843, pero volvió a España años después para participar en la revolución progresista de 1854. El gobierno de Espartero lo nombró teniente general. Al parecer, falleció en Gibraltar en 1857.

Nacido en Alcolea el año 1913. Estudió Derecho y Filosofía y Letras en la Universidad de Zaragoza. Se doctoró en Madrid con premio extraordinario. Fue académico de la Real Academia Española de la Lengua. Miembro de diversas sociedades españolas y extranjeras. Catedrático de Literatura Española en la Facultad de Filología de la Universidad de Barcelona.

Sus estudios se dedicaron a la investigación de las obras literarias desde don Juan Manuel hasta Jorge Guillén, dedicando especial interés a los escritores españoles del Siglo de Oro. Sus ambiciosas ediciones críticas de la poesía de Francisco de Quevedo y de Lope de Vega resultan insustituibles. Son también abundantes las publicaciones que hizo de autores aragoneses como los Argensola o Gracián. Falleció en Barcelona el año 2003.

Escritor español. Nacido en Chalamera (Huesca) en 1902. De espíritu rebelde y autodidáctico. Realizó el servicio militar en Marruecos. A su regreso se instaló en Madrid y trabajó como periodista en El Sol hasta 1929, fecha en la que empezó a escribir para periódicos más radicales.

Participó en actividades anarquistas, que terminaron decepcionándole, por lo que se hizo comunista, aunque más tarde, durante la Guerra Civil española, renegó también de esta ideología. En 1938 se exilió a Francia y posteriormente a México y Estados Unidos.

Su obra, de carácter realista, analiza con crudeza la realidad social desde una óptica revolucionaria. Es autor de Crónica del alba (1942), de carácter autobiográfico; Réquiem por un campesino español (1960); entre otras muchas. Falleció en 1982 en San Diego. 

El padre Peralta nació en 1918. Estudió en el Seminario de Lérida y, posteriormente, en la Compañía de Jesús. Licenciado en Teología, Filosofía y Filología Románica Es uno de los mayores especialistas en Baltasar Gracián. Autor de un buen número de obras, realizando una labor investigadora incansable hasta su muerte en 2001. 

Pedro Saputo. Historia de un pícaro aragonés. Fue escrito por Braulio Foz, aragonés de Teruel. El autor nació en 1781 en Fórnoles (Teruel), y falleció en Borja en 1865. Se desconoce la procedencia de este relato de tradición popular y transmisión oral.

 “En un episodio de la vida de Pedro Saputo, se le sitúa en Alcolea. Quien ideó una artimaña para que los de dicho pueblo pudieran vender el abundante vino sobrante de la cosecha. Saputo hizo pregonar que saltaría desde las Ripas, por los aires, con lo que acudieron desde muy lejos multitudes de gentes; aplazó muchas veces el experimento, ante la impaciencia de quienes esperaban, que acabaron entre tanto con el vino de Alcolea, según era el propósito de Pedro. Finalmente ascendió a las Ripas y anunció repetidamente y a grandes voces que iba a echar a volar, aunque lo que realmente arrojó al vacío fue su gabán, dejando burlados a los espectadores y salvándose de su indignación porque corrió a acogerse a sagrado en el Monasterio de Sijena.”